Quizás alguna vez te sentiste rechazado por alguien muy cercano como tus padres, tus hermanos, algún amigo, tu compañero/a –pareja- o alguien que conociste circunstancialmente…
La sensación de “no soy amado/a o no soy querido/a” es muy común en este mundo debido a que todos nacemos con una parte de la mente basada en el desamor (ego).
Esta mentalidad nos lleva a generar experiencias donde nos sentimos dejados de lado, abandonados, mal tratados o ignorados. ¿Te ha ocurrido?
Es muy doloroso cuando sucede, sin embargo es posible “salir de ahí” si nos lo proponemos…
Cuando sostenemos dentro de nosotros pensamientos de rechazo (en forma de rabia, crítica, odio, desacreditación o desvalorización) hacia cualquier otra persona…eso inevitablemente se proyectará en situaciones donde viviremos lo mismo.
Así funciona la mente: nos muestra implacablemente el amor o desamor que emanamos.
Queremos que nos amen, sin embargo por Ley Universal para recibir amor tenemos que darlo.
- ¿Me permitís acompañarte a mirar dentro tuyo?
EJERCICIO DE LAS 7 PREGUNTAS: ¿Podrías observar ahora tus relaciones más cercanas y comprobar QUÉ estás haciendo-siendo en ellas?
- ¿Estás siendo amoroso o amable en cada una de tus relaciones?
- De verdad, ¿lo estás siendo?
- ¿Estás pidiendo que te quieran más o que te presten más atención?
- ¿Estás enojado/a o molesto/a porque no te dan suficiente amor?
- ¿Estás reclamando tiempo, dedicación, atención,….es decir afecto en alguna de sus formas?
- ¿Cuántas veces negaste tu tiempo, tus caricias o tu mirada a alguien?
- ¿Dónde -dentro tuyo- estás rechazando a alguien porque no te gusta su personalidad, su color, su discapacidad, su pobreza, su forma de hablar, su poca educación o su aliento? (por poner solo algunos ejemplos…)
Estas preguntas pueden ayudarte a que mires en tu interior y reveas si eso –que estás haciendo- te está haciendo bien… (Valga aquí la redundancia).
¿Sabés?
Nuestro rechazo o falta de amor a alguien en la forma que sea… indefectiblemente nos causará una idéntica situación.
Por tanto todos los pensamientos de rechazo que tenemos hacia “otros” deben ser arrojados a la papelera porque:
1-Nos causa un gran dolor “tenerlos”.
2-Nos harán vivir el rechazo de “otros”.
Los pensamientos de rechazo hacia “otros” nos preparan para que también seamos rechazados. Los pensamientos de aceptación… nos obsequian lo mismo.
Para recibir amor tenemos que darlo y esta es una decisión que se inicia en el pensamiento (mente-causa) y continúa en el comportamiento que es su efecto.
¿Te ayudó el ejercicio de las 7 preguntas para conocerte más profundamente?
Si esto resuena dentro de tuyo, no dudes en escribirme. ¡Estoy para acompañarte!
ALICIA ORFILA – https://academia.aliciaorfila.com.ar